A Festejar
Tras un intenso y disputado partido, los Blancos lograron imponerse por 8-6 y coronarse, anticipadamente, Campeón del "Campeonato de Invierno 2006".
Anoche los Blancos lograron cerrar la excelente campaña realizada durante el Campeonato de Invierno tras vencer a su rival, los Rojos, por ocho goles a seis; ubicándose primeros en la tabla de posiciones con 15 puntos, a 12 de su rival y asegurándose, así, el título de Campeón a falta de dos fechas para el término del Campeonato.
Pero la tarea no fue fácil, pues los Rojos venían con la intención de aguarles la fiesta a su rival y con la esperanza de ganar lo que quedaba de campeonato para obligar a una final. Y así lo demostró desde un comienzo. No alcanzó a pasar un minuto de partido y los Rojos ya estaban arriba en el marcador tras un error del zaguero Carreño, quien entregó mal el balón permitiendo la apertura de la cuenta a través de Jordán.
Los Blancos estaban desconcertados y ya no servía quedarse a esperar a los Rojos para obtener al menos el punto que les daría el campeonato, por lo que tuvieron que salir a buscar el partido. Pero las cosas no les resultaban, fallaban en la entrega, en la defensa y en el finiquito de las pocas jugadas de gol que se creaban. Y las cosas se complicaron aun más cuando una nueva falla defensiva permitió que Jordá nuevamente ampliara la diferencia.
Todo era confusión en el equipo blanco, los pelotazos sin destino y la mala entrega del balón le permitía a los Rojos tener el dominio del partido y no se veía el camino a la recuperación alba. Pelao tuvo el descuento, pero Bochón se encontró el balón y logró despejar, luego lo tuvo el Pape y Pelao volvió a fallar minutos después. A los Rojos les salía todo, tocaban bien, llegaban con peligro, contenían los ataques Blancos e incluso su cuestionado portero , Bochón, estaba teniendo una buena noche.
El partido se mantuvo un largo rato con la diferencia a favor de los Rojos y el siguiente gol volvió a ser favorable al equipo de color. Un remate de Jordán que no tenía buen destino, rebotó en la espalda de Ramírez y luego en el pecho de Chito, colándose a un costado de la portería del estático portero, Cato. Hasta la suerte estaba, en ese entonces, con los Rojos.
Todo cambió desde ese momento, los Blancos comenzaron, con mas empuje que fútbol, a llegar con peligro a la portería de Bochón y, esta vez, la diosa fortuna estuvo con los Blancos. Un remate de Pape, ante la salida de Bochón, le rebota al portero Rojo y vuelve a rebotar en la rodilla del delantero blanco, metiéndose junto al poste; era primer descuento que dio nuevas fuerzas al equipo blanco.
Los Blancos siguieron con su arremetida y en una nueva jugada de Pape, el balón queda picando cerca de la línea, tras una sucesión de rebotes, y Pelao llega oportunamente para introducir el balón en la portería. Los Rojos se comenzaban a poner nerviosos, los gritos y retos pasaron del equipo blanco al rojo, principalmente por la facilidad que tenía Pape para recibir el balón en el área roja.
El empate no tardó en llegar, Pelao hace una pared con Pape y finiquita con un suave toque a un costado del portero rojo. El campeonato estaba nuevamente al alcance de la mano, pero esta vez los Blancos no retrasaron sus líneas y en lugar de esperar a su adversario fueron en busca del gol que los pusiera en ventaja. Y así sucedió, los Blancos se pusieron en ventaja con otro gol de Pape, goleador indiscutido del campeonato y del año. Ahora sí los Blancos se echaron un poco más atrás y dejaron al Pape como exclusivo delantero para recibir los certeros pelotazos que le estaban llegando desde la zaga blanca.
Pero la fórmula no resultó por mucho tiempo y un remate bajo de Pulido, que no encontró mayor oposición de Cato, puso el transitorio empate. El partido era de ida y vuelta, incluso llamando la atención de las personas que pasaban a esa hora por las cercanías del campo, quienes pudieron presenciar el sorpresivo golazo de Carreño. El central blanco envió un largo pelotazo buscando a Pape, pero en lugar de encontrar al delantero albo la pelota encontró las redes. Si bien la intención de Carreño no era el gol, su centro se convirtió en un golazo- la “Gran Miranda”- y se inscribió por primera vez en la tabla de goleadores, sin duda el gol más celebrado en varios partidos y dedicado a su polola e hincha número uno de los Blancos que también presenciaba el partido.
Se volvían a acercar a la copa, pero los Rojos consiguieron complicarle la tarea a los Blancos cuando lograron empatar tras un grosero error de Cato, quien perdió el balon en una salida y luego en lugar de despejar con el pié trató de controlar la pelota, perdiéndola ante la marca de Jordán quien definió con el arco descubierto.
Como de costumbre , sobretodo en este torneo, los Rojos bajaron su rendimiento al final del partido, el cansancio de Yeah, Armenakis y Pulido era notorio. Entonces, los Blancos tomaron el control del partido y comenzaron a llegar con mayor facilidad pero las oportunidades eran erradas una y otra vez por Pape, Ramírez y Popi.
Hasta que en un contragolpe Pelao remató de media distancia y puso nuevamente a su equipo en ventaja. Pape amplió el marcador, dejando las cosas siete a cinco. Con esa ventaja los Blancos se relajaron un poco y se concentraron más en la defensa del partido y del título, cosa que no impidió que Pape siguiera complicando a los defensores rojos y causando la ira y desconcierto de Jordán. Pero el mismo Pape en cercanías del arco, en lugar de pasar el balón a uno de los tres compañeros que tenía cerca, se puso a pisar el balón hasta que lo perdió y provocó el contragolpe rojo a través de Tobi, que terminó en gol de Pulido.
Pero ya era tarde, quedaba muy poco y los Rojos estaban muy cansados para seguir buscando el partido. Comenzaron a perder el balón con mucha facilidad y la única solución que encontraban para salir eran los perdidos remates de Moreno y los imprecisos saques de Bochón. Era increíble ver como se complicaban solos atrás, incluso sin marcas.
Si bien durante gran parte del partido los Rojos tuvieron un correcto juego, terminaron viendose muy mal con el balón en los pies y si no es por el, a veces inexplicable, derroche de los atacantes Blancos el marcador pudo haber sido más abultado. Solo Pape pudo ampliar las cifras y poner el lapidario ocho a seis con que terminó el partido, pero un resultado mayor no hubiese sido un justo reflejo de lo ocurrido en la cancha a lo largo del partido.
Finalmente sonó el timbre y los Blancos pudieron alzar los brazos y celebrar un merecido campeonato en el que han sido ampliamente superiores a sus rivales.
Aun quedan dos fechas de este campeonato y aunque el campeón de esta edición está resuelto, los punto restantes son válidos para el campeonato anual, donde los Blancos también llevan la delantera.
Impresiones:
"No sé si jugamos mejor. A ratos lo logramos. Pero al menos demostramos mucho amor propio para sacar adelante una situación adversa y difícil. Aunque el campeonato esté definido ya, todavía estamos adentro, queda mucho por jugar.
Sobre el título, más allá de dos o tres errores propios, los Blancos jugaron muy bien, tal vez el mejor partido del campeonato. Felicitaciones al Campeón". Bochón, Capitán Rojos.
"Al principio del partido los Blancos estaban muy desordenados y tiraban puros pelotazos, (quizás en ese momento los blancos pecaban de confiados) lo que aprovechó el equipo rojo para quedar en ventaja. Luego para variar, se notó la superioridad de los Blancos que se merecía ganar el campeonato. Además no puedo dejar de mencionar el gol de la fecha, sino del campeonato: el gol de Pablo... lo mas sorpresivo y que ayudo bastante para dar confianza a los Blancos, ya que recién los Rojos habían empatado.... GRANDE BLANCO CAMPEON!!!!!!”. Cote, hincha Blancos
“Luego de celebrar el mejor partido del campeonato entre Rojos y Blancos, éstos últimos resultaron merecidos ganadores. No queda más que felicitarlos”. Tobi, jugador Rojos
“Merecíamos ganar este campeonato y así lo demostramos en la cancha, fuimos ampliamente superiores al equipo rojo a lo largo de casi todo el torneo, sólo tuvimos una fea caída en la segunda fecha, pero supimos reponernos y aquí estamos… ¡celebrando el título!
Felicitaciones a todo el equipo y espero que terminemos bien este campeonato y repitamos esta campaña en el próximo y en lo que queda del año. Además quiero felicitar al Pape por ser el goleador, a menos que algo muy raro pase, y a Pablo por su golazo, se lo merecía por todo el sacrificio que hace partido a partido, un gran premio. ¡¡Vamos CAMPEONES!!” Pelao, capitán Blancos.
Hasta que en un contragolpe Pelao remató de media distancia y puso nuevamente a su equipo en ventaja. Pape amplió el marcador, dejando las cosas siete a cinco. Con esa ventaja los Blancos se relajaron un poco y se concentraron más en la defensa del partido y del título, cosa que no impidió que Pape siguiera complicando a los defensores rojos y causando la ira y desconcierto de Jordán. Pero el mismo Pape en cercanías del arco, en lugar de pasar el balón a uno de los tres compañeros que tenía cerca, se puso a pisar el balón hasta que lo perdió y provocó el contragolpe rojo a través de Tobi, que terminó en gol de Pulido.
Pero ya era tarde, quedaba muy poco y los Rojos estaban muy cansados para seguir buscando el partido. Comenzaron a perder el balón con mucha facilidad y la única solución que encontraban para salir eran los perdidos remates de Moreno y los imprecisos saques de Bochón. Era increíble ver como se complicaban solos atrás, incluso sin marcas.
Si bien durante gran parte del partido los Rojos tuvieron un correcto juego, terminaron viendose muy mal con el balón en los pies y si no es por el, a veces inexplicable, derroche de los atacantes Blancos el marcador pudo haber sido más abultado. Solo Pape pudo ampliar las cifras y poner el lapidario ocho a seis con que terminó el partido, pero un resultado mayor no hubiese sido un justo reflejo de lo ocurrido en la cancha a lo largo del partido.
Finalmente sonó el timbre y los Blancos pudieron alzar los brazos y celebrar un merecido campeonato en el que han sido ampliamente superiores a sus rivales.
Aun quedan dos fechas de este campeonato y aunque el campeón de esta edición está resuelto, los punto restantes son válidos para el campeonato anual, donde los Blancos también llevan la delantera.
Impresiones:
"No sé si jugamos mejor. A ratos lo logramos. Pero al menos demostramos mucho amor propio para sacar adelante una situación adversa y difícil. Aunque el campeonato esté definido ya, todavía estamos adentro, queda mucho por jugar.
Sobre el título, más allá de dos o tres errores propios, los Blancos jugaron muy bien, tal vez el mejor partido del campeonato. Felicitaciones al Campeón". Bochón, Capitán Rojos.
"Al principio del partido los Blancos estaban muy desordenados y tiraban puros pelotazos, (quizás en ese momento los blancos pecaban de confiados) lo que aprovechó el equipo rojo para quedar en ventaja. Luego para variar, se notó la superioridad de los Blancos que se merecía ganar el campeonato. Además no puedo dejar de mencionar el gol de la fecha, sino del campeonato: el gol de Pablo... lo mas sorpresivo y que ayudo bastante para dar confianza a los Blancos, ya que recién los Rojos habían empatado.... GRANDE BLANCO CAMPEON!!!!!!”. Cote, hincha Blancos
“Luego de celebrar el mejor partido del campeonato entre Rojos y Blancos, éstos últimos resultaron merecidos ganadores. No queda más que felicitarlos”. Tobi, jugador Rojos
“Merecíamos ganar este campeonato y así lo demostramos en la cancha, fuimos ampliamente superiores al equipo rojo a lo largo de casi todo el torneo, sólo tuvimos una fea caída en la segunda fecha, pero supimos reponernos y aquí estamos… ¡celebrando el título!
Felicitaciones a todo el equipo y espero que terminemos bien este campeonato y repitamos esta campaña en el próximo y en lo que queda del año. Además quiero felicitar al Pape por ser el goleador, a menos que algo muy raro pase, y a Pablo por su golazo, se lo merecía por todo el sacrificio que hace partido a partido, un gran premio. ¡¡Vamos CAMPEONES!!” Pelao, capitán Blancos.